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Jumana Emil Abboud, Rossella Biscotti, Petrit Halilaj, Fermín Jiménez Landa, Asunción Molinos Gordo, Eduardo Navarro, Solange Pessoa, Khvay Samnang
Curaduría de Juan Canela
La modernidad estableció que el pensamiento es claro y brillante, relegando otras formas de consciencia percibidas como lo opuesto a los márgenes del conocimiento. Pero vivimos hoy tiempos de re-articulación de ciertas prácticas que apelan a lo espiritual, a lo ritual o a lo mágico como una necesidad de hacer frente a la desposesión neoliberal, rescatando formas descartadas de contar, narrar y explicar el mundo, y redefiniendo nuevos vocabularios, imágenes y sobre todo gestos que puedan suceder en la sombra. El ritual, como el arte, pone el símbolo en contacto con la realidad, posibilitando una extraña y perdurable presencia que genera un momento excepcional. Un espacio-tiempo en el que la fuerza vulnerable propia de nuestros días nos permite explorar la posibilidad de una forma diferente de pensar y viajar hacia el poder afectivo de lo desconocido. Una fuerza enterrada en el fango, que solo afecta porque es afectada, hija de aquella debilidad existencial descrita por Tiqqun[1] como el Bloom, que es veneno y antídoto, que te lanza al fondo para volver a tomar impulso y romperlo todo.
Cuando los animales hablaban con los humanos reúne el trabajo de diferentes artistas en los que la noción aymara de ch’ixi articulada por Silvia Rivera Cusicanqui[2] emerge de algún modo en lo mestizo, en lo ritual, en el tercero incluido. Palabra-talismán, mezcla abigarrada, mestizaje descolonizado, yuxtaposición, contraste, posibilidad colectiva para hacer polisémicas las palabras. Una colisión donde las partes no pierden la forma ni sus potencias, un gris jaspeado, mezcla imperceptible de blanco y negro, que se confunde pero nunca se mezcla del todo.
Revolvamos lo conocido con lo desconocido y perdámonos en lo indiferenciado. Escuchemos a aquellos animales que pertenecen a tiempos inmemoriales. Dejémonos confundir y permitámonos, de una vez por todas, otorgarnos la posibilidad de no saberlo todo y dejar espacio a lo imprevisible, a lo desconocido, a lo inesperado.
[1] Crisis de la presencia. Una lectura de Tiqqun, de Amador Fernández-Savater (Carne Negra n. 4)
[2] Ch’ixinakax utxiwa. Una reflexión sobre prácticas y discursos descolonizadores de Silvia Rivera Cusicanqui (Tinta Limón Ediciones)