• text
  • pictures
  • Guillaume Leblon
Guadalajara, México
Pataquès
20 sep 2017 - 18 nov 2017
Partial view
Partial view
Harlem's Kiss

2017.
Bronze and steel beams.
55 x 46 x 47 cm.

Lost Friend

2017

The innocent's coat

2016.
Aluminium and cosmichrome paint.
124 x 62 x 46 cm.

The innocent's coat

2016

Cuatro peces siguiendo

2017

Cuatro Peces Siguiendo (Detail View)

2017.Ceramics and steel.
8 x 183 x 18 cm

Lost Friend

2017.
Ceramic and steel.
169 x 200 x 100 cm.

... Don't Believe in Jesus

2017.
Digital print on vinyl.
Medidas variables.

Red Lemon

2017

Partial view
Abandoned Window

2017.
Fiberglass, ceramics, terracota and steel.
152 x 106 x 24 cm.

Abandoned Window

2017.
Fiberglass, ceramics, terracota and steel.
152 x 106 x 24 cm.

Abandoned Window

Abandoned Window
2017

Abandoned Window

2017

... Don't Believe in Jesus

2017

Travesía Cuatro se complace en presentar PATAQUÈS, la primera exposición individual en México del artista francés Guillaume Leblon. PATAQUÈS es la escenificación de múltiples eventos que de cierta forma han llegado al acuerdo mutuo de permanecer en tensión constante. Los diferentes ambientes contenidos en el espacio expositivo no se relacionan entre sí a través de la congruencia narrativa, sino por medio de una resonancia poética.

Las esculturas de Leblon se presentan como cortes transversales de narraciones mitológicas o de crónicas históricas que han sido vaciadas de personajes y ahora son habitadas por cuerpos ausentes, por monumentos en reversa. Esta apariencia iconográfica se ve desbordada por la ambigüedad simbólica, dejando como espacio único de diálogo a las dinámicas internas de los materiales que conforman a las obras; el deterioro se transforma en un lenguaje común.

Esta agencia de lo material puede interpretarse como un tipo de Eros. Si en el campo de lo humano Eros está determinado por la relación paradójica del amor y del odio, en los objetos existe también una tensión constante entre permanecer y desaparecer. Las políticas del deseo humano se traducen a las leyes de atracción de la materia en la dimensión de las cosas. Leblon deja que sus obras naveguen libremente entre estas dos tendencias. Esta disposición erótica de los objetos es una forma de abordar el cuerpo humano.

Leblon se aproxima a la noción del cuerpo desde dos vías periféricas. Los elementos esculturales muestran el cuerpo como ausencia, el cuerpo desvanecido funciona como un mero soporte de algo más. Mientras que la instalación fotográfica de gran escala ubicada en la primera sala cancela el cuerpo a través de un juego de dimensiones, algo que culturalmente conocemos como monstruosidad; en este caso la presencia corporal se lleva al extremo, adquiriendo características espaciales, se orienta hacia el extremo de la intimidad. Estas dos perspectivas complementarias crean un cuerpo fragmentado que se actualiza a través de una materialidad prestada. La corrosión del metal, el desmoronamiento de las piedras y la distorsión de las imágenes, como metáfora de la carne.